Porque una Boda Celta está llena de magia.
Te puedo decir que sí, que la magia existe y la he visto con mis ojos.
He visto cómo las personas llegaban a una Boda Celta y cómo salían de ella transformadas.
Esto de la magia tiene su punto y engancha.
Y es que en las Bodas que he realizado he visto cómo personas que no se conocían de nada, después de la celebración parecían amigos de toda la vida, o personas que venían sin saber muy bien qué esperar de este encuentro se abrían como una preciosa flor ofreciendo sus mejores regalos y bendiciones.
He visto y he palpado cómo cambiaba la energía cuando cantábamos todos juntos para los novios o bailábamos, tocando instrumentos como una tribu antigua y ancestral que une sus raíces y muestra su lado más humano.
¿Y qué me dices de los novios?
Ahora mismo te lo cuento.
Pues he podido ver cómo los novios se abrían de una manera espléndida en la que todos podíamos ver y sentir, el infinito amor que irradiaban el uno hacia el otro y que es el que precisamente, nos había unido a todos en aquel día.
La magia de las Bodas Celtas me ha permitido comprender lo que es una unión verdadera.
Una llamada del corazón que nos une a todos.
Esa llamada es el motivo por el que estás aquí en la tierra.
Por el que todos estamos aquí.
Por amor.
¿Sabes una cosa? Creo en la magia. Porque tú, yo y todos, somos personas verdaderamente mágicas y tenemos todo el poder en nuestro corazón para transformarlo todo en alegría, en belleza, en amor.
Y ya sé que sabes que somos eternos sembradores de semillas de amor, de esas de las que todos los reinos pueden alimentarse también.
Así que te doy las gracias por participar de esta hermosa creación que hacemos entre todos que veo con claridad en las Celebraciones Celtas que realizo.
La diferencia entre una celebración tradicional y una Celebración Celta, está sin duda, en la magia.
Ahora te toca a ti elegir, cómo quieres celebrar tu vida.
Te invito a descubrir la magia de las Celebraciones Celtas conmigo,
Lara Rivero.